En este
módulo hemos reflexionado sobre cómo podemos tratar la gramática en el aula para que su aprendizaje sea más efectivo. El aprendizaje, para que se produzca, requiere de cierto nivel de conciencia, para que los
alumnos sean conscientes de ciertas estructuras gramaticales y de cómo
funcionan es necesario algún tipo de enseñanza explícita. Pero es importante
remarcar que solo enseñando explícitamente ciertos contenidos a los estudiantes
y que estos los entiendan no es suficiente ya que necesitamos que estos
contenidos se practiquen muchas veces para que los estudiantes alcancen a
usarlos con fluidez. Además, las explicaciones gramaticales, tienen que ser
claras. La enseñanza explícita es más efectiva cuando los estudiantes pueden
detectar el patrón por sí mismos. En el aula podemos mostrar la gramática de
dos formas: de manera inductiva, descubriendo los estudiantes mismos las reglas
gramaticales a través de ejemplos; o de manera deductiva, dándoles las reglas
gramaticales de forma abierta. Es importante también, a la hora de enseñar la
gramática, cómo corregimos los errores. La corrección eficiente del error tiene
que hacer referencia a algo que se trató con anterioridad, es decir, cuando un
alumno comete un error de un contenido que todavía no ha visto, corregir ese
error no sirve para que el alumno lo aplique y recuerde en el futuro.
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